Arte y Espectáculos

En Viernes Santo estrena la polémica serie “The New Pope”

Creada y dirigida por Paolo Sorrentino, en ella lo sagrado y lo profano conviven en armonía. Está protagonizada por Jude Law y John Malkovich.

“The New Pope” es la serie creada y dirigida por el napolitano Paolo Sorrentino y protagonizada por Jude Law y John Malkovich que da continuidad a la historia de intrigas palaciegas y disputas de poder dentro de los pasillos del Vaticano y se estrenará este viernes 10 de abril a las 23 a través de Fox Premium Series.

Además, tras el estreno, los nueve episodios de una hora que integran la temporada estarán a disposición en streaming en el acceso premium de la app de Fox.

Secuela de la polémica miniserie de 2016 “The Young Pope”, la nueva creación del director italiano ganador del Oscar por “La grande bellezza” es una rara avis en el universo televisivo.

Es que no abundan las series como “The New Pope”, una propuesta con un énfasis visual que redondea una experiencia más del orden de lo sensorial que de lo narrativo.

El relato, transgresor de los tabúes religiosos, queda en ocasiones relegado detrás de la preciosista composición de los planos de Sorrentino, de su pictórica fotografía y de los deslumbrantes decorados que reproducen con fidelidad la intimidad del Vaticano.

A su vez, el ritmo disminuye su velocidad para ajustarse al del deleite contemplativo en un museo y sincroniza con los tiempos de la Iglesia Católica; una institución que se mantiene firme desde hace dos milenios justamente porque cambia poco y corre lento.

Desarrollada por Sky Atlantic, HBO y Canal+ y filmada en gran parte en los tradicionales estudios de Cinecittà, en Roma, “The New Pope” se inicia meses después de las acciones de “The Young Pope”, con el papa Pío XIII (interpretado por Jude Law) en coma.

La condición aparentemente irreversible del sumo pontífice pone en movimiento los engranajes de la conspiración y las batallas ideológicas entre los cardenales más encumbrados, que no perderán oportunidad para buscar el beneficio propio al postular al sucesor en la silla de San Pedro.

Allí, nuevamente brilla el cardenal Voiello encarnado por Silvio Orlando, el tan hilarante como calculador secretario del Estado Vaticano y fanático del Napoli que maneja los hilos del poder como pocos.

Como su popularidad es exigua, Voiello nunca reúne los votos de sus pares para ser papa y debe conformarse con influir en los cónclaves para ubicar en su lugar a alguien al que pueda manipular.

Pero el poder revela el verdadero ser de las personas y el tiro suele salirle por la culata: le ocurrió con el papa comatoso, el joven estadounidense Lenny Belardo que se convirtió en un tiránico Pío XIII, y le vuelve a ocurrir en esta temporada.

“En el Vaticano, el poder se gestiona en la sombra, a espaldas de la luz pública. En ese sentido, el desafío de ‘The Young Pope’ consistió en ser capaz de resquebrajar ese muro de secretismo”, afirmó Sorrentino en declaraciones a la prensa europea, sobre lo que motivó la serie original.

“Ahora en ‘The New Pope’, una vez abiertas las puertas de la institución eclesiástica, necesitábamos un nuevo reto, y se me ocurrió que podía ser interesante meter en problemas a la Iglesia confrontándola con la realidad contemporánea”, añadió el realizador italiano.

Es que en esta nueva miniserie la Iglesia deberá enfrentarse con dificultades como el fanatismo religioso, la corrupción y los escándalos de abusos sexuales a menores.

En el horizonte emergerá la figura de Sir John Brannox, un moderado aristócrata inglés elegido por Voiello para intentar llevar orden al mundo católico por medio de su “tercera vía” -lo que lo convierte en una suerte de dialoguista que surca el centro de “la grieta”-.

En su nueva identidad de Juan Pablo III, el Brannox de Malkovich sintetiza el enfoque de “The New Pope”, una propuesta que por momentos coquetea con lo sacrílego y que en otros aspira a lo trascendental, pero que finalmente no se toma a sí misma tan en serio.

Capaz de largos soliloquios de gran profundidad filosófica, Brannox muestra también su cara superficial cuando aprovecha su influyente rol como papa para conseguir entrevistas con Sharon Stone o Marilyn Manson, de quien se confiesa fan.

“Para mí, el cine y la ficción televisiva son juegos maravillosos, pero no demasiado importantes. Y es por esto, por la relativa intrascendencia de nuestro trabajo, porque rehuimos toda responsabilidad, que tenemos la libertad de hacer cosas inverosímiles, poderosas, divertidas y bellas”, confesó Sorrentino.

Te puede interesar

Cargando...
Cargando...
Cargando...